9 de marzo de 2010

Siento necesidad de ti


Vivo días eternos cargados de ausencias,

caricias perdidas añoradas por mi piel.

Nostalgia de tus manos notando mi presencia,

melancolía de unos  besos que me hacen vibrar


Ansío inquieta el final del día,

cuando acaba la espera que da paso a la noche.

Quiero dormir para poder  tenerte,

sentir mi cuerpo abandonar mi ser.


 Deseo quedarme en mi mundo de sueños,

donde no hay fronteras que separen nuestras almas.

Quiero notar el calor de tu cuerpo,

despertar y ver...,  que continúas en mí.

5 comentarios:

Tarzánnnnn dijo...

"...despertar y ver...que continuas en mi." Para mi gusto a vuelto el pincel tuyo, Mayte. Un clásico del blog, con tu estilo fino de decir lo quieres. Bonito. Bonito.Gracias-Besos-tzn

margari dijo...

Triste el dia,triste la noche cuando se fueron las caricias.
Tan sólo los sueños,quedan,mientras soñamos.
Vivimos, amamos,sentimos.
Vivimos lo amado,lo sentido,y deseado
LINDO MAYTE, MUY LINDO
Un beso, grande, grande
Margare

monpita dijo...

triste , mucha soledad me embarga al leer tus palabras may...mucha nostalgia sumada en cada dia... y un esperar de sueños que no son realidad...Me hubiese gustado que todo hubiese sido escrito en tiempo pasado.. y que ese final donde indica que el amor "continúa" en ella, , se cambie por un volver a empezar...
Sólo vuelco lo que sentí en tu escrito, y ya lograr movilizar el sentir de alguien es magnifico. felicitaciones. mon

Soñador dijo...

Precioso, me ha encantado la manera como expresas la ternura que contiene tu corazón y percibes aún soñando.Cuando despiertas y sabes que ese nuevo dia volvera a traerte esa libertad que tienes para soñar la ternura de tus abrazos y el calor de tus letras, muy lindo,Gracias

Mayte® dijo...

Ainss.. Al final conseguís emocionarme y más con estos dias que llevo.

Mil besitos desde el alma y graciasss
Por compartir momentos.

Sois maravillosos.

Callad, por Dios, ¡Oh buñuelo!.

(La foto es de otro día, los de hoy los haré esta tarde que no me ha dado tiempo) Callad, por Dios, ¡oh buñuelo! Que no podré resisti...