3 de octubre de 2010

Lejos

Han hablado unos minutos, él está triste, preocupado, con miedo a perderla, tiene algo que no sabe definir pero que le provoca una especie de pánico, una extraña sensación de vacío, como si las circunstancias les obligaran a cerrar una etapa maravillosa de su vida, como si no fueran a ser capaces de salvar los obstáculos que aún les quedan por salvar, siente que ella se le escurre de las manos como si fuera arena y, lleno de impotencia, tan sólo tiene clara una cosa y es que la ama que, por encima de todo y de todos, la ama y no puede ni quiere dejar de amarla.

En su desesperación, no es capaz de pensar con lucidez, de mirar al futuro más allá de hoy y el hoy es negro, como si el cielo estuviera oscurecido por una gran tormenta que jamás fuera a amainar. Pero está equivocado, porque si hay algo en la vida que puede con todo es el amor, y la ausencia y el tiempo no son nada cuando hay amor, con él tarde o temprano todo se soluciona.

Se cree muy desgraciado porque ahora mismo no pueden estar juntos, no se da cuenta de que la verdadera desgracia es no saber amar y ellos de eso saben mucho. ¿Cómo no saber?, si a pesar de estar separados por miles de kilómetros, de semanas sin ni siquiera oírse porque ni tan siquiera por teléfono pueden hablar, el primer pensamiento de él es ella y el de ella es él.

Ella hoy está más lúcida que él, parece a veces como si se turnaran para estarlo, para darse sostén el uno al otro y, cuando uno flaquea, el otro le ayuda a levantarse, son como un tándem, una maquinaria que no funciona nada más que al unísono porque está diseñada para eso, así son ellos, así es el amor que se profesan.

Así que hoy, en los pocos minutos que han tenido, oyendo sus voces entrecortadas por los sonidos de las olas y las interferencias, ha sido ella la que le ha animado a él, la que le ha insistido para que se tatúe en su mente una frase: "nunca, bajo ninguna circunstancia, dejaré de amarte". Hoy no han reído mientras conversaban, no ha sido un día normal, pero ella ha intuido al final una sonrisa suya y eso le basta, es más que suficiente, le conoce tanto que sabe que pasará el resto del día triste y pensativo pero también sabe que, cuando flaquee demasiado, se agarrará a algún detalle, al sabor de sus besos, al calor de su voz, al futuro que les espera, y algo de eso o todo ello, le dará la fuerza necesaria para mirar el mañana con el optimismo que ambos necesitan y pensará: "ya falta menos, cada día un poco menos".

Cuando él partió para hacer ese trabajo en una plataforma petrolífera ambos sabían que no iba a ser fácil, nada fácil, pero había algo que también sabían y es que para ellos la distancia no es el olvido, es sólo algo transitorio.



Continuará...

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Por muy separados que estén, el amor siempre les mantendrá vivos de ilusión, esperando el día que podran volver a juntarse en un abrazo profundo.
besos Maria
cuidate
enmatojado

BONBOM dijo...

El amor no se termina en la distancia, simplemente duele no tener a la persona amada cerca sentir su olor,su calor, sus besos, pero cuando esa distancia se supone qu es para labrarse un futuro pués bienbenida sea.

Te quiero guapa cuidate mucho.

Besazos

wpaa. dijo...

La distancia duele,pero el amor lo puede todo , si es amor de verdad.
Ademàs la distancia pone a prueba la intensidad de ese amor, y al final la recompensa .
Me gustò mucho el principio de esta historia ,creo que va a ser muy interesante.
Un beso
wpaa.

* Inés * dijo...

La mayor prueba de la resistencia de un amor firme es la distancia.
Siempre hay uno de los dos que es más débil, pero si es amor del bueno, todas las dificultades se superan.
Seguiré tu ¨Lejos¨.
Prometen estas olas que llevan y traen amores.
Me gusta...
Gracias, siempre.

Scarlet2807 dijo...

María:
Sé que tu historia será bellísima, como todo lo que escribes, pero no sé que decirte con respecto a la distancia, de verdad no lo sé, tal véz es un tema sensible para mí...
Muchos besos, Scarlet2807

Rosa Mª Villalta dijo...

María te felicito por tan bello escrito. Me ha gustado muchíisimo.
Que pases un feliz día.
Con todo cariño, Rosa.

Fibonacci dijo...

Seguiremos las peripecias de esta pareja,ya veremos cuan fuerte son los lazos que los une.
Muy bien redactado.
Un beso casto

SalvaX dijo...

La distancia es un prueba importante para el amor, si no seresiste la separación es que el sentimiento no era todo lo firme que pensábamos.

Mayte® dijo...

¡Impresionante María!

Toca esperar y comprobar si la distancia soporta ese "nunca"

Un besote genia

Manases dijo...

Parece que son pocos los momentos que tienen para poder hablar, mi idea, si sirve es que los momentos que estén juntos los vivan intensamente………….voy a leer la otra parte besos María

Alejandro dijo...

Te digo lo que a Fibo, voy a leer la siguiente, esto promete.

Un saludo.

Carmen dijo...

Muy bueno, María, tu redacción es impecable y tus textos se notan "vivos".

Un beso

Callad, por Dios, ¡Oh buñuelo!.

(La foto es de otro día, los de hoy los haré esta tarde que no me ha dado tiempo) Callad, por Dios, ¡oh buñuelo! Que no podré resisti...