3 de julio de 2010

UN ENCUENTRO DIFERENTE...

Hoy he tenido un día bastante agradable, y me siento muy contenta por eso.
En la mañana muy temprano, antes de venirme a mi trabajo intercambié algunas letras con alguien a quien quiero mucho, y eso bastó para que mi humor, fuera excelente y mi día haya sido especial.
Como algunos sabrán, yo trabajo en una oficina de “asesorias contables”, dicho de una manera clara, la labor de la oficina, es asesorar a nuestros clientes, que no son muchos, pero, si bastante adinerados, de qué manera pueden pagar menos impuestos, sin incurrir en delito, más claro aún, “ como robarle al fisco, legalmente” (me leyera mi jefe, me cuesta el puesto) jajajajajajajajaajjajajajaajaj
Les asombraría comprobar que las personas mientras más dinero tienen, más les duele pagar...
Bueno, somos un equipo muy pequeño de personas, y nos llevamos como una verdadera familia, realmente, el ambiente de camaradería y cariño en mi trabajo es insuperable. Las labores de júnior, las realiza una mujer, para ser exacta somos tres mujeres y mi jefe, (único hombre) , mimado por todas, y se lo merece, es brillante y una gran persona.

Hoy la júnior ( Elena) estaba sobrecargada de trabajo, así que yo me ofrecí gentilmente a ir a buscar unos documentos de un cliente a un bufete de abogados. El día estaba precioso, y me apetecía, salir un rato.
Fuí a un edificio de 15 pisos, ubicado en el sector alto de la ciudad, edificio que según me contó mi jefe, está lleno de bufetes de abogados, salvo, unos pocos departamentos al parecer habitados por ellos mismos.
La oficina a la cual iba estaba en el último piso, me entregaron los documentos, y me retiré, al ir a tomar el ascensor, salió de otra oficina , un hombre alto y guapo (según yo) elegantemente vestido, de unos cincuenta y tantos años. Llegamos juntos al ascensor, cuando éste abría su puerta, el me hizo una seña, que pasara yo primero, entro....... y tras mío antes que él , entra un pequeño perrito, que ni idea de donde apareció, solo sé que entró como si estuviera habituado a hacerlo.
Una vez dentro del ascensor los tres ocupantes, él, yo y el perro. El me mira con una de sus cejas levantada, ( como de pregunta), y yo le devuelvo la mirada, de una forma desafiante , como diciéndole “ yo no tengo nada que ver con esto”
Nos observamos los dos sin abrir la boca , durante largos minutos, mientras el perrito, me hacía mil gracias y yo me agachaba a hacerle cariño, para ser franca, yo adoro a todos los perros (hasta los callejeros), y ellos a mi.
Hasta que no pudo aguantar más y me suelta...
-¿es tuyo?
Yo le contesto, “no”, ( como me tuteó , hice lo mismo) le respondí...
-Yo pensaba preguntarte lo mismo.
Ante eso, nos miramos, y los dos al mismo tiempo, y largamos una carcajada riendo, pero, al parecer mi nuevo amigo ( el perrito), no le hizo gracia, porque se zafó de mis mimos, y se dirigió directamente donde él, levantando una de sus patitas, y orinándole un zapato y parte de su pantalón.
Yo, no pude evitar reír con todas mis ganas ante el hecho tan insólito, y sobre todo su cara, Diosssssss...
El soltó un “chilenismo”, que no lo pongo, porque se leería vulgar, y la verdad, no lo fue, es lo malo que tiene el medio escrito, que no se leen las inflexiones de la voz, ni la intencionalidad de las palabras, así que sustituiré el chilenismo por un “ Dios”. ¿ok?
-¡¡¡Dios, el perrito me arruinó el día!!!, tendré que volver a cambiarme, y yo que tenía pensado a la salida invitarte a un café.
Yo no podía articular palabra, por la risa que tenía.
Ya llegábamos al primer piso, sujeta el botón de la puerta del ascensor para que no se abra y me dice...
-¿ Me das tu teléfono, y dejamos el café para otro día?
-Creo que mejor no, si el destino quiere , nos volveremos a encontrar, suelo venir a éste edificio, y creo que tu trabajas aquí.
-Yo trabajo y vivo en éste edificio, pero soy enemigo de darle tanto trabajo al destino, que ya tiene bastante, estás en tu derecho a negarte a darme tu teléfono, pero no podrás rehusar la tarjeta con el mío, porque va con un ofrecimiento de “ abogado gratuito”.
Acto seguido., me entregó su tarjeta de visita, la que yo acepté, ( porque lo encontré ingenioso)
Le dije
-Espero no necesitar tus servicios muy pronto
-¿Y eso? ¿por qué?
-No sé, pero abogado, lo asocio a lio
-Error, ¿y una herencia? o ¿una sociedad?
-Tienes razón...
Luego nos despedimos, de beso en la mejilla, como grandes amigos, y el me susurró al oído, "espero que ése café no tarde mucho”.
El perro salió junto conmigo del ascensor, se fue raudo a conserjería , seguro debe haber sido de propiedad de alguno de los habitantes del edificio, y debe haber estado habituado a sus paseos en ascensor.


Scarlet2807.

12 comentarios:

BONBOM dijo...

UY que bien suena eso, me gusta mucho amiga me contaras como sigue, porque intuyo quetiene una continuación, yo te lo deseo mucho, te quiero preciosa, gracias por tu amistad besos mil

Mayte® dijo...

Eres tremendaa
jajajajaja

me hubiera encantado estar ahí contigo y partirnos juntas de la risa

Un beso grande lokita

(¿te dije hoy que te quiero un mundo?)

Anónimo dijo...

adelante cuñis, date esa oportunidad y ve te tomas ese cafe, no sabes que pueda tenerte el destino... saludos. la vene.

Scarlet2807 dijo...

Vene, CUÑIIIIIIIIIIIIIIII. que alegría leerte...
Un gran beso, Scarlet2807

Rosso dijo...

Scarlet, lo que no te pase a ti, jajaja, ah, el café se lo debes al motivo, o sea, al perrito. Besos guapa, me haces reir un montón.

Manases dijo...

Las historias de los asacnsores,anda que no dan para escribir toneladas de historias, pero me da a mi que el chucho es del abogado y que lo tiene de señuelo para ligar.. es un consejo de tu guardaespaldas...besos

SalvaX dijo...

Estoy con Manases, creo que el perrito está muy bien adiestrado, detecta las chicas guapas y simpáticas y sabe los gustos de su dueño
¡...Ingenioso el tipo!.
¡Cuidado con los abogados!, tengo uno en la familia y conozco sus tretas.
Un beso

* Inés * dijo...

Scarlet, tienes imán para las historias bellas, tienes miedo a que no fructifiquen, tienes belleza interior a raudales y la maestría con que nos las relatas, me convencen de que algún día encontrarás lo que tu corazón anhela.
Te admiro mucho¿ sabes?.
Me encantó tu escrito, mucho, felicidades.
Gracias, siempre.

María dijo...

Scarlet, de aquí en adelante nuevo kit en el bolso (mini bolsito como el de las pinturas pero con amoníaco, puedes utilizar un pulverizador de los del perfume, unos guantes desechables y un mini cepillo) todo ello por si tienes que "ayudar" a algún señor a que se limpie, jajajaja.

Eres un imán.

Besos

D'MARIE dijo...

Ay hermanita que simpatica tu historia,,creo debes haber dejado cautivado al abogado y al perrin...no dejas en pie,ni a los bichitos ajajaj...Un besito..

junco dijo...

Bonita historia, un perrito muy listo


bessooooosss

Anónimo dijo...

Scarl, yo, de no recibir herencia, intentaría montar un negocio.. No dejes pasar meses para el café ehh.
Un beso

Callad, por Dios, ¡Oh buñuelo!.

(La foto es de otro día, los de hoy los haré esta tarde que no me ha dado tiempo) Callad, por Dios, ¡oh buñuelo! Que no podré resisti...