31 de mayo de 2010

JUICIO Y EJECUCION

En un lado de la tétrica sala se halla el elevado e imponente asiento de los jueces. La silla del presidente, situada en el centro, está cubierta con una cortina de tela de color oscuro, coronado por una gran cruz de madera que domina toda la sala. Al frente está el banquillo de los acusados.

Así solían describirse los tribunales de la siniestra Inquisición católica. La aterradora acusación contra los desventurados reos. Era la de “herejía”, palabra que evoca imágenes de tortura y muerte en la hoguera. La Inquisición era un tribunal eclesiástico especial creado para erradicar la herejía, es decir, las ideas o doctrinas que se apartaban de la ortodoxia católica romana.

¿Porque quiero hablar de este asunto? Si de algo nos puede servir la historia es para aprender a no volver a cometer los mismos errores, pero desgraciadamente, el ser humano no aprende nunca, en este tiempo sigue habiendo muchos inquisidores y muchos Torquemadas. Y si no porque no echamos un vistazo todos juntos.

La infame Inquisición española fue establecida en 1478 mediante una bula pontificia que promulgó Sixto IV, a instancias de los reyes Fernando e Isabel. Su objetivo era combatir a los “marranos”, calificativo dado a los judíos falsamente convertidos al catolicismo para escapar de la persecución; a los moriscos, seguidores de los islamismos convertidos a la fe católica por la misma razón, y a los herejes españoles. Por su fanatismo, el primer gran inquisidor español, Tomás de Torquemada, fraile dominico, encarnó el lado más infame de la Inquisición. Es curioso se le llego a llamar la “santa inquisición”

La historia muestra que los inquisidores acudían al suplicio para arrancar la confesión a los presuntos herejes. En su empeño por atenuar la responsabilidad de la Inquisición, los comentaristas católicos han escrito que la tortura también era corriente en los tribunales seculares de la época. Ahora bien, ¿justifica ese hecho semejante actuación de parte de ministros que afirmaban ser los representantes de Cristo? ¿No debieron haber mostrado la misma compasión que Cristo mostró a sus enemigos? Para ver el asunto con objetividad, reflexionemos en una simple pregunta: ¿Habría torturado Jesucristo a los que discrepaban de sus enseñanzas? Él dijo: “Continúen amando a sus enemigos, haciendo bien a los que los odian”. (Lucas 6:27.)
En la práctica, el inquisidor gozaba de poderes ilimitados. “Las sospechas, las denuncias, incluso los rumores, bastaban para que el inquisidor citara ante sí a la persona afectada.

La condena y ejecución de los herejes se posponía para reunir a varios de ellos en un horrendo espectáculo dos o más veces al año. Se les hacía desfilar en una larga procesión a la vista de todos los espectadores, quienes observaban con una mezcla de horror y fascinación sádica. Después de hacérseles subir a un cadalso construido en medio de una gran plaza, se procedía a la lectura de las sentencias en voz alta. Los que abjuraban, es decir, que renunciaban a las doctrinas heréticas, se libraban de la excomunión y recibían varias penas, entre ellas la cárcel perpetua. A los que no abjuraban, pero que se confesaban con un sacerdote en el último momento, los entregaban a las autoridades civiles para que los estrangularan, ahorcaran o decapitaran, y luego incineraran su cadáver. A los impenitentes los quemaban vivos. La ejecución de la condena tenía lugar algún tiempo después, tras otro espectáculo público.

Desgraciadamente todos hemos llegado a ser un espectáculo público, donde se nos juzga o incluso llegamos a juzgar, son muchas las personas que viven pendientes de lo que hacen los demás, pero su interés no es altruista, solo les mueve el sadismo y la carroña , están dispuestos a hacerse pedazos por despellejar y comerse vivo al primero que se cruce en su camino.

Todos deberíamos aprender de la historia y asi de esta manera , no volver a cometer los mismos errores.

11 comentarios:

María dijo...

Deberíamos aprender de la historia, por supuesto, pero no lo hacemos. Y, lamentablemente, como dijo Marx, la historia se repite.

Con adecuaciones a la actualidad vigente pero se repite. Los sanbenitos ya no son prendas de ropa, pueden ser muchas otras cosas pero los seguimos "colgando" y haciendo daño.

Muy bueno tu escrito, nos debería hacer reflexionar.

Besos

wppa. dijo...

Inigualable tu articulo.
Efectivamente y por desgracia siguen existiendo muchos/as Torquemadas ,que para juzgar y condenar solo les basta que alguien les vaya con un chisme ,se lo cuenten al oido, para sentirse jueces verdugos y con derecho a crucuficar a los demàs.
Recordemos como murio Torquema ,para los que en su propia pelicula adoptaron su identidad.
Torquemada nunca se arrepintio de su comportamiento ,pero si que murio viejo,paranoico,avariento y miserable.
Maneses sobresaliente.
Un beso

Scarlet2807 dijo...

Sin lugar a dudas , uno de los mejores escritos que he leído en éste blog.
Tanto es su exposición, como en su contenido.
Lamentablemente todo lo que dices es absolutamente cierto, y co dice Wppa, aún existen y existirán muchos/as Torquemada.

Un beso, y mi más profundo agradecimiento , por tu interesante escrito, Scarlet2807

Mayte® dijo...

Creo que te lo dijeron todo y muy bién dicho. Estoy de acuerdo en todo con las tres.

Gracias por todos los temas que nos traes a modo de reflexión.

Un beso

Carmen dijo...

Has hecho un escrito perfectamente estructurado, lleno de rigor histórico y presentando en sus párrafos finales la cruda realidad actual.

Eres realmente bueno escribiendo, mis felicitaciones.

Un beso

Rosso dijo...

Manases, poco me queda que añadir, los anteriores comentarios son suficientemente esclasrecedores y poco puedo aportar, solo decirte que lo hiciste perfecto, me encanto leerte.
Un abrazo.

Alejandro dijo...

Muy bien enfocado, tanto como recordatorio histórico como por la
referencia a los modernos inquisidores.

Un saludo

Anónimo dijo...

Manases a mí me gusta mucho leerte. Hay dos razones muy claras para ello. Escribes muy bien y la historia siempe me atrajo.
Gracias por dejar aquí estos escritos.
Un abrazo

* Inés * dijo...

Manasés, dije que escribirías páginas de gloria "et violà" la muestra.
Muy bien documentada, exposición sobria y de medida exacta.
¿Te nombramos el historiador del blog?.
Gracias, me encantó.

María dijo...

Ahhhhhhh,pues si váis a dar títulos yo me pido el de payasa oficial del blog, además lo quiero con antiguedad ¿eh?, jajaja

D'MARIE dijo...

Muy bueno es leerte ,de paso aprendo algo mas en la vida..completo lo tuyo..gracias!!
Besis

Callad, por Dios, ¡Oh buñuelo!.

(La foto es de otro día, los de hoy los haré esta tarde que no me ha dado tiempo) Callad, por Dios, ¡oh buñuelo! Que no podré resisti...