La felicidad era una isla para Saramago
El mundo de las letras lamenta la muerte, a los 87 años, del premio Nobel portugués.- Sus restos serán incinerados mañana en Lisboa, adonde viajarán desde Lanzarote
Se va Saramago, el hombre que nos previno contra una destructora epidemia de ceguera. Y en estos tiempos su adiós parece un símbolo.El primer Premio Nobel que recibió la lengua portuguesa ha sido un referente para toda la izquierda del planeta. Afiliado al Partido Comunista, y a pesar de sus éxitos literarios, Saramago no dejó jamás de implicarse en todos los asuntos sociales y políticos.Quizá por su activismo eligió como compañera desde hace 25 años a la también periodista sevillana Pilar del Río.España y Portugal unidos en un matrimonio que a Saramago le habría gustado llevar hasta el altar de lo político."El hombre que se atrevió a decir no", ése podría ser un buen epitafio para él. En estos tiempos en los que, más que nunca, nos obligan a decir que sí.AGENCIA ATLAS 18-06-2010
(Es un artículo informativo cogido de un diario, por eso no están abiertos los comentarios)