Hoy, sinceramente, no tengo ganas de hablar ni de escribir sobre trivialidades (hace tiempo que no las tengo).
Si habéis ojeado por algún rincón, habréis leído que soy de Granada. Aquí hay una plataforma de amistad al pueblo sirio, de la que no formo parte porque nunca tengo tiempo. En ella hay amigos míos que, siempre que he necesitado que me echen una mano, me han ayudado sin reparos.
Hoy, me avergüenzo de no haber ido a ninguna de sus manifestaciones, a pesar de
que más de una vez me lo pidieron. Que si el cansancio, que si la hora, que si bla, bla, bla. Ellos nunca me han puesto excusas para venir a ayudarme cuando los he necesitado y hoy, avergonzada, entono el "mea culpa".
Escribo esto aquí porque sé que mucha gente me lee.
Sé que todos, de alguna manera, terminamos siendo indiferentes ante las desgracias ajenas. Es muy fácil decir "qué triste" y, a renglón seguido, dejar una carcajada en el comentario siguiente.
¿ Podemos, por un segundo, leer lo que tenemos que decir y tomarnos a los demás aunque sea por un instante un poquito en serio?. Igual nadie deje un comentario en esta publicación, pero es lo de menos. Lo que me importa es, que de algún modo, os llegue. Perdonad si hoy no me río, pero mis amigos se merecen mi respeto y mi apoyo, aunque sea un momento.
¿ Podemos, por un segundo, leer lo que tenemos que decir y tomarnos a los demás aunque sea por un instante un poquito en serio?. Igual nadie deje un comentario en esta publicación, pero es lo de menos. Lo que me importa es, que de algún modo, os llegue. Perdonad si hoy no me río, pero mis amigos se merecen mi respeto y mi apoyo, aunque sea un momento.
PlataformaSiriaEnGranada